viernes, 28 de agosto de 2009

Drogas sí, tinturas no


El tema de la despenalización de las drogas me parece una idiotez. Pasa que mucha gente solicita temas porque son de actualidad, pero que en realidad a mi me importan un carajo, como con el fútbol y la TV, por ejemplo.

Más importante sería hablar de la tintura que usa Carlos Fayt, que en el mundo abogaderil es un capo, y que es muuuuy diferente a la tintura que usa el “Burrito” Ortega, que no le cambia el color del pelo pero que lo pone como si se hubiera fumado un porro (o algo más), aunque solo sea efecto de la tintura nomás –tintura que se toma con soda y viene en caja tetrabrik o botella y que puede ser de varias sepas–.

Y yo me pregunto… nadie le dice nada a Fayt de la tintura? Creerá este señor que realmente todos pensamos que a sus 91 años (sí, nació en 1918) no tiene una cana? Si fuera santiagueño, tal vez me lo creería, pero es salteño, por lo que algún pelo blanco en la cabeza debe tener.

Y acoto: si no es tintura, le da a la falopa, lo que explicaría ampliamente el tema de la despenalización.

¿Qué es más peligroso?, un drogadicto de mierda o un anciano que llama la atención porque no tiene una cana y, lo que es peor, tiene el pelo del mismo color que Viviana Canosa (que contradicción, mi madre). Creo que ambos pueden causar la misma conmoción en la calle, accidentes de tránsito, tropiezos y hasta una reacción en masa de proporciones inconmensurables.

Ahora falta que Fayt salga a la calle con botas con taco aguja, cartera y pantalón ajustado. ¿Qué diría Helena Jaiton de Nolasco?, Y Carmen Arjibay? Y Zafaroni? Y Zulma Lobato? Y el padre de Maiquel Yacson?

Qué quiere Fayt, ¿competir con Silvio Soldán -poseedor de un gato-, el Bambino Veira o Mostaza Merlo?

Señores de la Corte: ¿no se puede prohibir el uso de tintura en los hombres? Porque una cosa es la coquetería, pero otra el ridículo, y no el ridículo personal, porque Fayt que haga lo que quiera. Pero a nivel mundial este tipo salió en todos los medios internacionales hablando de la despenalización de la droga. Nos hace quedar como el orto a los argentinos nos hace.

Si un funcionario para asumir debe presentar una declaración jurada, en el caso de los hombres, además, deberían hacer un juramento de no darse la biaba mientras ocupen cargos públicos.

Por favor, no dejemos que el árbol nos tape el bosque. Basta de Jueces de la Corte Suprema con tintura. Basta de políticos con tintura. ¿Estos son los tipos que después nos dicen si podemos o no drogarnos? Para mí es una locura.

Finalmente recuerden: Perón cumple, Evita dignifica, y el Fernet lava las culpas.

Y como dijo ese señor pelado que cantaba, “a nadie la amarga un pete”.

martes, 25 de agosto de 2009

Sobre travas, trabas y enanos


Esto es así, no hay marcha atrás. Ahora allegados a Ernestina piden saber, y ya lo dijo el Señor: "si pide, dale matraca nomás, para que sepa y guarde".

El tema acá es el tema, o sea, el problema es el tema... el tema del que quieren saber.

En este caso particular la consulta pedagógica es sobre travestis o, como dijo mi amigo Nicolás Darío ("El Rey del Podrido"), los "chaveschis".

No obstante, debo hacer una aclaración pituitaria: lo que sé de travestis lo sé en teoría, ¿se entiende? O sea, nunca "probé" un trava. Solamente ví, y apenas ví, me alejé... pero algo me contaron, claro.

La cosa es que Chansón Gastard, mirando al techo, luego de rascarse la barba y pasarse los dedos por el pelo un par de veces, preguntó: "¿por qué todos los travestis son altos?". Y Ernestina, siempre tan dócil y tras 2 minutos de silencio, dijo: "solo hay un boludo que puede tener respuesta para eso". Acto seguido, se sentó y me mandó un mail solicitando un material al respecto (me escribe porque no me habla), agregó un par de cuestiones a tener en cuenta (como que no hay travas enanos y que los travas "tienen culos que son una escultura" -Ernestina dixit-), y cerró el breve correo de tres líneas con una arenga a tono del tema: "escribí algo, putoooo".

Ahora paso a enumerar unas cositas -no hay demasiados secretos-:

1- Una vez, tomando un cafesito con Carlos Dargüin, coincidimos en la observación en que físicamente, y en promedio, los hombres tienen más estatura (y volumen) que las mujeres. "Escribite algo de eso", le dije (como hace Ernestina conmigo, pero de mejor modo, como una sugerencia). Por eso es común ver travas altos.

2- Al tema del altor, hay que agregarle el tema del tacor: si un tipo de estatura normal usa tacos, parece que mide como 2 metros, y eso las diferencia de las chirusas de las putas. Ahora, lo de los travas enanos... no sé... creo que entre el Circo de Vostok y el de Thiany los compraron a todos (hoy el pase de un enano trava vale casi lo mismo que lo que el Manchester City pagó por Tevez, y ni hablar si es rubio y de pelo largo, como Maxi López... ese enano vale una fortuna vale, se para para todo el viaje).

5- El tema del culo es porque se lo hacen.... o sea, les hacen la cola durante un tiempo, juntan plata, van al cirujano que les hace una cola mejor (y capaz que la prueba para ver cómo quedó), y después les siguen haciendo la cola, pero a otro precio. Aquí la relación es directamente proporcional: "a mejor cola, más caro" (1), -aunque, claro, está empíricamente comprobado que el nivel de putez puede tirar por la borda esta ecuación económicomatemática: "a mayor putez no importa el precio sino tener una chota adentro, a sí que si no hay plata, no importa" (2)-.

23- Si quieren saber tanto de travas, vayan y pregúntenlen Ustedes, degenerados de mierda.

14- No recomiendo ir y encarar de una a un trava para hacer esta consulta. Mejor es culiárselo un par de veces y, una vez que haya confianza, preguntar.

6- Refuto la afirmación de Luis Pedro Tony, quien dijo en Polémica en el Bar: "quien no se comió un pibe alguna vez". Si ese viejo puto cree que todos se culean entre todos, está muy equivocado (a pesar de la Marcha de Vaporeso).

11- Otra recomendación: si por algún motivo, cualquiera que sea (preguntarle la hora, preguntarle si en esa esquina para el 14, o cuánto cobra), deciden encarar a un travesti, no le mencionen a Zulma Lobato, porque corren el riesgo de ser molidos a palo, lo cual es grave, no solo por la paliza, sino porque quedarán eternamente marcados como "el boludo al que lo cagó a palos un trava", y que en el DNI figura como TPT (Te Pegó un Trava), y no te dejan votar nunca más.

11.1- Zulma Lobato es la oveja negra de los travas. Es más, ni siquiera es un trava. Es un jubilado que se disfrazó para el cumpleaños del nieto, pero justo ese día no tomó la pastilla del Alzeimer, se perdió y se fue de la casa. En algún momento de su extravío alguien le rompió el orto y le gustó... y ahí está Zulma Lobato, que para el "gremio" vendría a ser tan humillante como un trava con bigotes o barba candado.

7- Metele una traba a un trava y vas a ver lo que te pasa.

8- Bibi Andersen, Cris Miró, Malena Candelmo y Florencia de la V son señores travas, pero no las inviten a un asado, porque cerca del fuego se derriten.

8.1- Uh, que quilombo explicar lo del punto 8: son señores, sí, pero también son travas. Cuando digo que son "señores travas" quiero decir que son travas de primer nivel, que en una mujer sería como una vedete. Es más, son travas tan bien hechos, que son como vedetes pero con manija.

03- Concluyo citando nuevamente a mi grandísimo amigo "El Rey del Podrido", quien siempre recuerda que "Noé no discriminó y metió a todos los animales en su arca", ante lo que debo afirmar que, más que no discriminar, Noé no le hacía asco a nada y le gustaba la partuza como loco.

Bueno, me voy porque desde que llegué a la oficina siento un olor a salsa de tomate para ponerle a la pizza que me está matando (el tema de los travestis se hizo muy largo para mi gusto... sacámela un poco Ernestina).

(1) Manual de Economía para Trolos, de Ante "Pitágoras" Garmaz, Tomo 6, cuarta edición; Editorial Petete; verano del ‘93, página 135

(2) Ídem