miércoles, 10 de febrero de 2010

Líneas para Diego


Somos hijos del rigor, parece. Yo hubiera preferido ser hijo de Frigor. Pero no. Encima de eso… Ernestina, la jefa, que mete presión para que escriba. Lo único que se me ocurrió era referirme a la última convocatoria de Maradona. Sin embargo la línea editorial de este medio expresa claramente: “a Diego no se le pega, entendiste?”, lo cual acotó terriblemente mis opciones.

Una lástima, pero voy a tener que escribir de alguna otra cosa.

….....

Maradona, después de hacer un par de líneas, lo llamó a Bilardo a las 4 a .m. y le dijo: “Dr., hagamos una convocatoria”. Estaba al pedo y volaba como loco (no de fiebre).

El Dr. (el más cuerdo, aunque parezca loco), para no contradecirlo, le dijo “metele Diego, sos el más grande. Hacé lo que quieras”.

Fue así que el genio del fútbol de todos los tiempos hizo lo que mejor sabe: se mandó cualquiera, y armó la convocatoria más resonante del fútbol mundial, con nombres propios de primera línea, incluido un lesionado.

Cuando la prensa le preguntó si iba a pasar la barrera de los 100, Diego entendió mal. No pensó en los 100 jugadores convocados, sino en el promedio de edad, y dijo: “a Niembro le hago cerrar el orto”, y lo llamó a Francisco Varallo, que cumplía 100 pirulos, para que se despida jugando para la selección. También pensó que Housemann se merecía un homenaje. “Que delantera, mamita. A Jamaica le metemos 8” , pensó.

Le pasó el fax a Bilardo con la nómina y el Dr casi se muere cuando la vió: “convocaste a Ruggeri!!!!!!!” le gritó por el teléfono. El problema no era que el Cabezón se retiró hace una década, el problema era el odio que se tienen. “Es Ruggeri o yo, Diego”, lanzó el ultimátum.

El astro guardaba un as bajo la manga. “Tranquilo Carlos, a vos te pongo de 5 y repartís todos los alfilerazos que quieras. Los bidones dejámelos a mí. Esos negros se van a cagar hasta pasado mañana. Lo que pasa es que con Pancho y el Loco arriba tengo que reforzarme bien atrás”.

Pero Bilardo dijo que no y, para no tener más quilombo, Diego tuvo que bajar de la lista a Bilardo, a Ruggeri, a Giusti, a Carnevali, a Housemann y a Varallo. “Je, te faltó Cucciufo”, le dijo Grondona cuando supo de la lista inicial. “No, ése es un muerto, que se quede donde está nomás”, dijo Diego, que además despotricó contra Francéscoli porque “cuando lo llamé para avisarle que lo convocaba me cortó. Es al pedo, con los de River nunca se puede contar”.

Además, el Dr prohibió la citación de Angeleri “porque le dicen Mambrú”, de Verón porque es “la Bruja”, de Fernández porque es “la Gata”, de Páez porque “es Satanás” y de Hauche porque “es el Demonio”, de Calderón porque “es Caldera”, de Franco porque “es Peppino”, de Orcellet porque “es Catriel”, de Santiago porque “es Ladino” y del otro porque “es Hoyos”, de Ariel porque “es Rosada”, y de Gallardo porque “es el Muñeco”.

Al final, pobre Diegote, no le quedó otra que llamar a los que llamó.

Bueno, más o menos así fue la previa del último llamado de jugadores a la selección, mal que les pese a los que idolatran al más grande de todos los tiempos (y que cuando ganemos el Mundial de Sudáfrica me lo van a refregar en la cara por la eternidad toda).

Conclusión, no se puede aspirar y convocar, primero hay que convocar y después aspirar. Es más mejor.

PD: Ernestina, muchas gracias por la libertad de expresión de tu medio. A pesar de las exigencias, permitís que todos los que trabajamos acá (mis amigos y yo) escribamos lo que realmente sentimos. Muy lindo los cactus, le dan vida a la oficina. Poneles nombres. Saludos y acordate que si viajás siempre hay que llevar aspirinas.


NDR: La muestra de que aquí hay libertad en la expresión de las ideas es que se permite la publicación de esta nota que será, y ojalá quede claro porque si no la letra con sangre entra, la última en la que se dedicarán líneas ofensivas para con el 10. Nos despedimos con la alegría de saber que el Maestro Vaporeso ha recapacitado y desde ahora sólo brinda en honor al más mejor de todos.